CORTADURAS DE LA ZARZUELA
Luis
Gortázar Rotaeche
El
abuelo de Reyes bajando la Gran Cortadura de la Zarzuela, 1927. Esta foto dio
la vuelta al mundo!
ÁLVAREZ DE BOHORQUES Y GOYENECHE, José, Marqués de los Trujillos, (X).
Apellidado, indistintamente, Álvarez de las Asturias Bohorques y Goyeneche.
Madrid, 23.III.1895 – 27.II.1993. Jinete y campeón olímpico.
Es uno
de los jinetes más relevantes del siglo XX, tanto por la variedad de las
modalidades que practicó (saltos, carreras, polo y completo), como por los
méritos deportivos alcanzados. Durante sus noventa y siete años de vida estuvo
vinculado a los caballos. Trujillos fue hijo de Mauricio Álvarez de las
Asturias Bohorques y Ponce de León, IV Duque de Gor, y de Rosa Goyeneche y de
la Puente. Desde los tres años ya montaba poneys, y a los seis recibió sus
primeras clases. Ingresó en el ejército -en el Arma de Caballería- en 1910
acabando como número dos de su promoción y número uno en equitación. Mandó
entonces un telegrama a su padre, con el siguiente texto; “Viva España. Soy el
número uno en equitación”. Al salir de la Academia su primer destino fue el
Regimiento de Húsares de Pavía, en Alcalá de Henares, y allí ganó su primera
competición hípica en una prueba de saltos.
Con
respecto a las carreras de caballos su debut se produjo en 1916, el mismo año
en el que entró como alumno en la Escuela de Equitación Militar de donde sale
con el número uno entre 104 alumnos. Corrió en carreras lisas y vallas, en
total 261, de las que ganó 107 (69 en liso y 38 en vallas). Con semejante
palmarés fue record absoluto del Gentlemen Riders en siete años. Concursó en
saltos formando parte de equipo hípico español en Londres, París, Niza, Roma,
Lisboa, Nueva York etc, participando en 16 Copas de Naciones, en las que el
equipo ganó cinco y Trujillos obtuvo el primer puesto individual en las de
Niza, Nápoles y Madrid. Asimismo ganó el Gran Premio de Niza en 1928. En España
ganó once Copas del Rey, tres veces el Gran Premio de Madrid y dos veces el de
Barcelona, entre otros.
En 1920
obtuvo el Record de España de Altura, pasando con su caballo Vendeen los 2,20
metros, marca que se mantuvo imbatida durante 27 años. Interrumpió
voluntariamente su carrera hípica para acudir a la guerra de África, tras el
Desastre de Annual del año 1921. En su primera Olimpiada (París, 1924) logró el
noveno puesto individual. Formando equipo con los también capitanes Navarro
Morenés y García Fernández, ganó la primera medalla de oro olímpica española,
en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam del año 1928, hecho que no se repetiría
hasta 50 años después. El Gobierno les ofreció un banquete en su honor, al que
asiste S.M. el Rey y el Presidente del Gobierno.
Posteriormente
continuó con sus actividades hípicas como profesor de la clase de exterior de
la Escuela de Equitación Militar. Allí dio fama mundial a las llamadas
“Cortaduras de La Zarzuela”, estableciendo otro record mundial. Las cortaduras
eran unos despeñaderos donde los alumnos se entrenaron durante los años 1927 y
1928. En una de las barrancadas los jinetes bajaban desde una altura total de
más de 15 metros, once de los cuales eran en caída casi vertical. Muy pocos
consiguieron bajar sin caerse. Las fotos y película de las cortaduras dieron la
vuelta al mundo y elevaron el prestigio de la Escuela, lo que llevó a Don
Alfonso XIII a presenciarlas. El Rey quedó vivamente impresionado y
posteriormente nombró a Trujillos Gentilhombre de S.M. con Ejercicio, en
recuerdo de la hazaña. La equitación militar española se situó en la cumbre
hípica mundial. En 1930, a los 35 años, se retiró de las pistas hípicas y
posteriormente del ejército, acogiéndose a la llamada Ley Azaña, pasando a la
situación de retiro voluntario. A raíz de su participación en la sublevación
del General Sanjurjo en 1932 tiene que salir de España, contrayendo matrimonio un
año después en Biarriz con Victoria Pérez de Guzmán y Moreno, hija del marqués
de Aulencia y nieta del marqués de Bolaños y del Conde de los Andes. Durante la
contienda civil estuvo destinado en la Secretaría de Guerra del Estado Mayor en
Burgos. Trujillos continuó vinculado al mundo de los caballos en dos facetas;
como maestro y seguidor de la carrera hípica de su hijo José Álvarez de
Bohorques y Pérez de Guzmán, marqués de Aulencia -que llegó a ser número uno en
el ranking mundial del año 1961 en concursos de saltos internacionales
oficiales (CSIO) y ganó la Medalla de Plata en el Campeonato del Mundo en
Buenos Aires el año 1966-, y como directivo de entidades hípicas.
Trujillos
fue uno de los mejores y más completos aficionados. Desde 1921 había formado parte
de la Sociedad de Fomento de la Cría Caballar de España, siendo Presidente
desde 1956 a 1976, en una de las épocas de mayor esplendor y desarrollo de las
carreras de caballos en España. En dicho período la Sociedad de Fomento creó la
yeguada Ulzama en Navarra y se potenciaron las carreras en Madrid, Sevilla,
Valencia y San Sebastián. En esta última ciudad el Ayuntamiento le otorgó el
Tambor de Oro en 1971. Después fue Presidente de Honor de la Sociedad, y llegó
a entregar el premio Memorial Trujillos. José Álvarez de Bohorques fue un
hombre religioso y de carácter muy castizo, fuente inagotable de anécdotas, que
acumuló a lo largo de su dilatada vida. Perteneció a la Real Maestranza de
Caballería de Granada. Fue galardonado con la Gran Cruz del Mérito Agrícola,
Medalla de Oro del Mérito Deportivo, dos Cruces del Mérito Militar, Medalla de
Marruecos, Medalla de la Campaña 1936-1939, Placa de San Hermenegildo,
Caballero de la Orden de Avis y Medalla de Oro Olímpica.
BIBL.:
Le Sport Universel Ilustré, 30.III. 1928; The Illustrated London News,
19.V.1928; “Triunfo de los jinetes españoles en Ámsterdam”, ABC,
20-26.VIII.1928; New York Herald Tribune, 18.V.1930; RUBRYK, “El Marqués de los
Trujillos”, Blanco y Negro, 2.III.1930; “Spain´s Dare-Devil Horsemen”, Los
Angeles Examine, Magazine, 19.I.1930; G. DE LUCAS, ”Marqués de los Trujillos,
el Olímpico de Oro”, Marca, 20.VII.1967, págs. 1-8; M. DE LUQUE, “Trujillos en
la leyenda”, Revista Ecuestre, junio 1986, págs. 22-29; L.C. “Los Trujillos”,
Revista Hípica, sep/oct. 1975, págs. 3-8; “Mitos Olímpicos, José Alvarez, el
oro del capitán”, Marca, 1.IX.1988; J.M. GOZALO y F. OLMEDA, Españoles de Oro,
cien años de medallas olímpicas, Madrid, COE, 1999.
Luis Gortázar Rotaeche
1927
ante SM. El Rey Alfonso XIII.
Chevi Sr.