Agustín Rodríguez de Mondelo me dice lo que sigue:
"Hola a todos:
En el momento que pueda como le he dicho a Chevi os
mandaré fotografías que tengo en casa de mi madre, de El Segundo Deposito de
Sementales de Jerez de la Frontera, Yeguada Militar de Jerez, Palacio de las
Cadenas, Cortijo Vicos y Garrapilos ajajajajaj Diosssssssssss que recuerdos y los disfruté
hasta los 5 años de edad al igual que la Yeguada pero se han quedado grabados
en mi como no teneis ni idea …….. Así que me imagino que en vosotros a fuego.
De Enganches tengo muchisisisisimas fotos hechas por D. Luís Rivero Merry y
Joaquín Rivero Merry, apasionados de los enganches, que gracias a ellos en el
Séptimo Deposito de Sementales de Córdoba se recuperó la gran colección que
había. Aunque luego pasó a Écija. Estoy muy emocionado de todo lo que leo
aquí,,,,,, ya le pasé la Web a Chechu Torres, hijo de Santiago Torres para que
la disfrute y comparta con su padre.
Un fuerte abrazo a todos.
Agustín."
Leyenda de la foto
"Sus manos están volcadas. Largas las
cuartillas. Le han crecido los cascos. Ya no brilla su mirada. En el castaño
encendido que un día fuera su capa, hay canas, y alguna matadura en los
corvejones. La crin ha dejado de ser brillante. Anda cansino. Tampoco relincha
al paso de la Yeguada. No dará más productos. "Novar" hijo de
"Niña II" hispano árabe, y de "Carruco" pura sangre inglés,
ha llegado a su ocaso. Puede un día no lejano, por precepto reglamentario,
salir a subasta. Su jinete, el entonces
Capitán don Rogelio Rodríguez Mondelo, le hizo intervenir en más de trescientas
pruebas hípicas. Consiguió setenta y tres victorias. Ganó la Copa de Oro de la
Península, el Gran Premio de Caballos Nacionales, campeón de Ginebra y Portugal,
llegó a saltar tres veces los dos metros de altura...y hoy, el que fue el rey de la hípica, y oyó las más
encendidas ovaciones, puede caer en manos de un tratante, agonizar ante la
acometida de un toro, o sentir sobre su grupa el látigo de un auriga. Pero confío
que esto no sucederá. Lo he visitado recientemente en la Remonta de Jerez donde
sigue cuidado con extremo mimo. Es un caballo Jerezano que dio gloria a su
tierra, y apelo a su antiguo dueño, don José Bohórquez- puesto que para más
abundancia lleva puesto el hierro de su hermano Fermín-, para que el día aciago
en que vaya a ser vendido, pague más que el que más y de nuevo vuelva a la
antigua dehesa que lo viera nacer, le sirva de descanso y encuentre su bien ganado
reposo.
Jerez es tierra de buenos caballos. Amarlos
es casi un rito. Bien se merece este magnífico ejemplar manos cariñosas que al
final de su vida le arrimen buena cebada, fresca alfalfa y algún que otro
terrón de azúcar.
Procreó hijos y consiguió triunfos. Más no
pudo hacer. ¡Hay que salvarlo!
Todo se lo merece.
Conde de Villafuente Bermeja"
José V. Ruiz de Eguílaz y Mondría
Coronel de Caballería.